¿En qué me he inspirado?
Para la elección de la obra del Museo del Prado en mi homenaje al Bicentenario del mismo… la inspiración vino a mí nada mas entrar en su enorme Sala de ampliación de Moneo.
La sola presencia de las ocho Musas en esa Sala imponente en fondo rojo, ya impacta, pero una vez me documento acerca de las Musas, inspiradoras de las Artes, Ciencias y Letras, nos evocan la inspiración que tanto necesitamos los artistas. Por otro lado, la sucesión en sus adquisiciones hasta llegar al Prado es una historia magnífica que realza la importancia de mujeres Mecenas, a menudo desconocidas en la historia del arte. Gracias a la pasión por el arte de las Reinas Cristina de Suecia e Isabel de Farnesio, esposa de Felipe V, las Musas están en el Prado.
La obra homenaje: la instalación artística
La componen un enorme Collage (1m x 2.20 m) inspirado en la Musa Euterpe en soporte de poliéster del color de la Sala roja, la figura de Euterpe ha sido realizada con estampación en tela de la imagen de la escultura, el ropaje está inspirado en las prendas típicas helenísticas chitón y manto. Los tirabuzones del cabello se han hecho a mano en tela, y para el chitón se ha utilizado una pieza de crochet, símbolo de lo artesanal y único.
El Collage es el punto del que emergen tres prendas diseñadas siguiendo la misma inspiración, hechas con piezas de crochet vintage, gasas y algodones (expuestas en tres maniquíes).
Musa Euterpe
Proceso de creación
En el Collage he plasmado a la Musa haciendo mi interpretación con texturas, aunando moda y arte. El fondo rojo representa la sala, el crochet semicircular e arriba es el techo de la sala y las Musa está modelada con tejidos únicos.
El Collage es el punto de partida para diseñar tres modelos utilizando el mismo colorido y tejidos, además de crochets vintage, he jugado con gasas, encajes, guipur…
¿Quieres saber más sobre las Musas y la historia de sus sucesivas adquisiciones hasta llegar al Museo del Prado? Sigue leyendo…
¿ Quiénes son las Musas?
Las Musas, hijas de Zeus y Mnemósine inspiradoras de las Artes, las Ciencias y las Letras, son las siguientes:
CALIOPE: «la de bella voz» Musa de la Poesía épica.
ÉRATO: «la amable, la amorosa» Musa de la poesía amorosa.
CLÍO: «la que alaba, la que ensalza, la que celebra» se le atribuye la Historia.
MELPÓMENE: «la melodiosa» Musa de la tragedia.
EUTERPE: «la muy placentera» Inspiradora de la Música.
POLIMNIA: «la de los muchos himnos» Musa de la pantomima, de la mímica.
TALÍA: «la festiva» Musa de la Comedia y de la poesía bucólica.
URANIA: «la celestial» Musa de la Astronomía,Astrología y también de las Matemáticas.
TERPSÍCORE: «la que deleita en la danza» Musa de la Poesía ligera y la danza.
En el Museo del Prado falta Melpómene.
¿De dónde proceden y cuál es la interesante historia hasta acabar en el Prado?
Las llamadas Musas de la Villa Adriana (anónimo clásico),130-140 d. C., mármol, aprox. 152 cm de alto. Halladas hacia 1500 en Tívoli, en el «Teatro de la Academia» u Odeion de la Villa del emperador Adriano Réplicas romanas, según modelos áticos de 150-100 a. C.
Se las llama “Las musas de la reina Cristina de Suecia”, después de su muerte tras pasar por varios propietarios, fueron adquiridas por Felipe V, y una vez muerto el rey Felipe V, fue su segunda esposa Isabel de Farnesio la que se hizo con su adquisición para la Granja de San Ildefonso.
El grupo de musas (ocho) fue adquirido por Cristina de Suecia fueron restauradas y completadas por Ercole Ferrata. Instalado en una sala de su palacio, fue durante casi cien años, hasta 1774, el único grupo de este tipo que se conocía. Las ocho musas eran utilizadas por Cristina de Suecia para escenificar su propia presencia en la Roma de finales del siglo XVII. Cuando la reina se sentaba en el trono, situado frente a una estatua de Apolo instalada en la misma sala que las musas, asumía el puesto de la novena musa, representando así, en un lenguaje típicamente barroco, sus ambiciones científicas y artísticas.
Sentadas en altos promontorios de roca, están vestidas de modo uniforme: con un chitón de mangas debajo de otro chitón de tela algo más gruesa que lleva broches sobre ambos hombros y está ceñido bajo el pecho, y con un amplio manto que cubre parte de la espalda, regazo y piernas. Sus pies calzan el coturno con triple suela o sandalias con lengüetas que cubren el empeine. Como modelo para los grupos de musas romanos se ha pensado con frecuencia en grupos de musas griegos, Las musas pasaron a través de la Col. Livio Odescalchi en Roma a la Col. de Felipe V e Isabel de Frarnesio, en San Ildefonso (Texto extractado de Schröder, S. F.: Catálogo de la escultura clásica, Museo Nacional del Prado, 2004, pp. 204-214).